Una mujer de 47 años con cáncer en estadio 4 advierte con urgencia sobre un síntoma sutil que había pasado por alto.

Una mujer de 47 años con cáncer en estadio 4 advierte con urgencia sobre un síntoma sutil que había pasado por alto.

A veces, nuestro cuerpo nos da una suave advertencia antes de hacerse oír con más fuerza. Fatiga, molestias leves y pasajeras, dolores y molestias que atribuimos a la rutina… ¿Y si algo más profundo se escondiera tras estas señales? Una mujer decidió compartir su historia, no para asustar, sino para concienciar.
Un cansancio que consideramos “normal”.
Susan, de 47 años, madre activa de dos hijos, se sentía agotada a menudo. Un cansancio que atribuía a todo lo que la vida le deparaba: trabajo, responsabilidades, noches cortas… Tanto que a veces paraba en su coche solo para echarse una siesta rápida.

En aquel momento, no le veía nada raro. “Nos decimos que simplemente estamos agotadas, como todo el mundo”, confiesa. Pero en retrospectiva, se da cuenta de que este cansancio extremo y persistente merecía atención.

Síntomas sutiles, pero reveladores.

 

 

Continúa en la página siguiente⏭️