Trece años de ausencia, de preguntas sin respuesta, y luego un tímido sobre su mesa. Dentro, tres palabras escritas por un niño: «Papy Luc». Ese día, su vida cambió.

En ese momento, Luc sintió que su corazón, largo tiempo entumecido, volvía a latir.

Un nuevo capítulo guiado por la esperanza

Los procedimientos serán largos: investigaciones sociales, audiencias, retrasos administrativos. Pero  Madame Moreau  sonríe:  «Se nota cuando es la historia correcta » .

Y Luc recupera sus colores. Pinta la habitación de invitados de azul. Compra una cama con forma de coche. Aprende a cocinar gofres.

Porque una certeza vive dentro de él: nadie volverá a separar a esta familia.

A veces la vida nos da una mano cuando hemos dejado de esperarla