6 beneficios para la salud de dormir en una habitación fría y cómo refrescarla (y por qué quizás no quieras usar un ventilador)
Cuando la temperatura sube, la solución instintiva para muchos es encender un ventilador. Sin embargo, aunque los ventiladores pueden proporcionar un alivio inmediato, hay consideraciones de salud que deben tenerse en cuenta. Según investigaciones, usar un ventilador mientras se duerme puede suponer varios riesgos para el bienestar.
Riesgos para la salud de dormir con un ventilador:
Si bien no es necesario evitar por completo los ventiladores, es importante comprender sus posibles desventajas. El Asesor del Sueño destaca cuatro razones clave por las que los ventiladores podrían no ser la mejor opción para todos:
- Reacciones alérgicas: Los ventiladores pueden levantar polvo y polen, haciéndolos volar. En personas alérgicas o asmáticas, esto puede agravar los síntomas, provocando malestar y trastornos del sueño. Limpiar regularmente el ventilador y la habitación puede mitigar estos problemas.
- Aire seco: La circulación constante del aire puede resecar la piel, los ojos y la boca. Quienes duermen con la boca o los ojos abiertos pueden experimentar sequedad extrema. Para combatir esto, tenga un vaso de agua junto a la cama o use un antifaz para protegerse de la sequedad del ventilador.
- Irritación sinusal: La exposición continua al aire frío puede resecar los senos paranasales, lo que provoca irritación y una sobreproducción de moco. Esto puede causar dolor de cabeza, congestión nasal y malestar general.
- Dolores musculares: La exposición directa al aire del ventilador puede provocar rigidez muscular o calambres, especialmente si prefieres que el aire te sople directamente durante la noche. A pesar de estos posibles problemas, no todos sufren efectos adversos al usar un ventilador. Para algunos, una habitación más fresca ofrece numerosos beneficios para la salud.
