Además, la vitamina C presente en las naranjas ayuda a prevenir el estrés oxidativo, que puede acelerar el deterioro del cartílago.
El consumo regular de naranjas puede ayudar a reducir el dolor de rodilla y mejorar la función de las articulaciones con el tiempo.
fresas
Las fresas son otra fruta excelente para aumentar los niveles de colágeno. No solo son ricas en vitamina C, sino que también contienen antioxidantes que favorecen la salud articular en general.
Estos nutrientes ayudan al cuerpo a reparar los tejidos y mantener la integridad del cartílago.
Incluir fresas en su dieta diaria puede ayudar a mantener una producción saludable de colágeno, lo que es particularmente importante para mantener las rodillas fuertes y resistentes a medida que envejecemos.
